
Alarma casera


-No necesito ser una madre violenta, ¡yo educo con la palabra!
-¡Pero me acabas de dar una cachetada mamá!
-¡Ah! ¡pero es que no estabas dejando hablar!
Como hacer un rico sancocho en 4 sencillos y fáciles pasos:
1. Llama
2. A
3. Tu
4. Mamá
-Mami, ¡tienes preferencias en casa!
-No seas mentiroso. ¡Para mi son iguales tú y mi campeón!
-¡Cariño el niño sigue creyéndose fantasma!
-¡No tenemos hijos!
-¡Entonces creo que tiene razón!
-Todos los problemas se solucionan con una sonrisa.
-Pero mamá, ¡me acabas de pegar!
-Si, ¡pero me dio mucha risa!
—Te aseguro que mi hijo para tener 32 años es un hombre muy maduro, ¿verdad Carlitos?
—Mira mami, ¡con este frío parece que fumo!
La hija le pregunta a la mamá:
-¿Mamá? ¿por qué te casaste con mi papá?
-¡Porque lo creía inteligente!
Luego la niña le pregunta al papá:
-Papá, ¿por qué te casaste con mamá?
-Por eso mismo hija, ¡porque no soy inteligente!
Corriendo el niño le dice al papá que lee tranquilamente el periódico en la sala:
-Papá! ¡un león se metió a la habitación de mi mamá!
El papá sin inmutarse le dice al hijo:
-No te preocupes hijo, ¡Los leones saben como defenderse!