Benito le pregunta a su mamá:
-Mami, ¿tú sabes lo que es una pregunta indiscreta?
-Si Benito es algo que no se puede contestar fácilmente.
-Mami, ¡entonces el examen de hoy en la escuela estaba lleno de preguntas indiscretas!
Chistes de Jaimito
¿Dónde se fabrican las nubes?
Al ver una fábrica que votaba grandes cantidades de smog por las chimeneas la niña Cachumbos le dice a su mamá:
-¡mira mamá..! ¡aquí es donde fabrican las nubes!
¿No cabo o no quepo?
-Papi, ¡no cabo!
-Benito, no se dice cabo, ¡se dice quepo!
-¡Bueno al fin y al quepo me entendiste! ¿no?
La disciplina a un niño
-Benito, ¡te disciplino porque te amo!
–Si, ¡pero parece que me amas más que mis hermanos!
Bolitas para adivinar
Iba gritando por la calle Benito:
-¡A la orden! ¡Bolitas para adivinar! ¡cómprenme la bolitas para adivinar!
Un hombre se le acerca y le compra. Cuando se la va echar a la boca reacciona y le dice al niño:
-Benito! ¡pero esto es una bolita de mocos!
-¡Otro que adivina!
Salir de la ciudad en la versión del niño
La mamá le advierte a Benito:
-Pepito, si viene el cobrador dígale que estoy fuera de la ciudad.
A los pocos minutos golpean a la puerta. Es el cobrador.
-Niño, ¿su mamá está?
-No señor, salió de la casa… mejor dicho salió del barrio… mejor dicho, ¡se fue de la ciudad!
–¿Y será que se demora?
–Creo que no, ¡porque dejó una leche en la estufa!
El chiste del señor oso
Una vez iba el señor oso por el camino del bosque dando una caminata. De pronto se encontró con el conejo quien le preguntó:
-Señor oso, ¿es verdad que usted tiene una lista de sus víctimas?
-¡Sí, es verdad!-contestó el oso
–¿Y en esa lista estoy yo?- preguntó el conejo.
-¡Sí! ¡en esa lista estás tú!- contestó resuelto el oso.
–¿Entonces me vas a comer?- Nuevamente preguntó muy tímido el conejo.
-¡Si te voy a comer!
Fue entonces cuando el oso se comió al conejo.
Siguió caminando por el bosque el señor oso cuando se encontró con el señor burro. El señor burro le preguntó al señor oso:
-Señor oso, ¿es verdad que usted tiene una lista de sus víctimas?
-¡Si es cierto!- respondió el señor oso-
–¿Y en esa lista estoy yo?- preguntó con miedo el señor burro.
-¡Si en esa lista estás tú!- contestó el señor oso.
–¿Y entonces me vas a comer?- preguntó el señor burro aún con más miedo.
-¡Si te voy a comer!- respondió el señor oso y se comió al señor burro.
Continuó por el sendero el señor oso hasta que se encontró con la señora jirafa quien al verlo se asustó mucho. La señora jirafa entonces le preguntó:
-Señor oso, ¿es verdad que usted tiene una lista de sus víctimas?
-¡Si, es verdad!- respondió el señor oso mientras se tragaba deseoso su saliva.
–¿Y en esa lista estoy yo?- preguntó con mucho miedo la señora jirafa.
-¡Si en esa lista estás tú!- contestó el oso mientras se saboreaba.
–¿Y entonces me vas a borrar de esa lista?-Preguntó con más miedo la señora jirafa.
-¡Si te voy a borrar!- respondió el señor oso. ¡Y la borró!
Fin del chiste.
Espaguetis de colores…
-Mamá, ya no quiero más espaguetis de estos rojos y azules!
-¡Cállate o te arranco las venas y arterias del otro brazo!
Chillar…
-Benito, por qué le echaste grasa en el vestido a tu hermana?
-Porque no paraba de llorar!
-¿Y eso qué tiene que ver?
-Que mi papá, siempre, cuando una puerta chilla le echa grasa!
Maestro comilón…
Papi, ayer mi maestro se comió en la fiesta, ¡Treinta hamburguesas y diez refrescos!
-¡Ah caray! ¡me gustaría conocer a tu maestro Benito!
-Pues, ¡date prisa papi! ¡porque hoy lo entierran!






