Tan pobres que

Comer carne de langosta

La profesora veía a Benito cada vez más flaco y sin ánimo de estudiar así que un día decidió preguntarle:
-Benito, ¿Qué comen en tu casa?
-Carne de langosta profesora.
-No entiendo Benito, se supone la carne de langosta alimenta, y tú, cada vez me llegas más flaco y demacrado.
-No me entiende profesora, comemos carne de «la-angosta» ¡porque si fuera de la gruesa no alcanzaría para todos!

Mas pobres que…

  • ¡Un niño tan pobre que en la pasada Navidad lo único que le trajo el niño dios fue los dientes frontales de leche!
  • Era tan pobre que en el colegio me decían Papá Noel… ¡Porque siempre andaba con el mismo traje!
  • Un pueblo tan pobre que han asaltado tres veces el camión de la basura.
  • Éramos tan pobres, que el día que mi mamá nos trajo a la casa un pollo asado, lo comimos con cuchillo y tenedor, con el tenedor lo deteníamos, ¡Y con el cuchillo lo defendíamos!
  • ¡Es un país tan pobre que su pájaro nacional es una mosca!
  • Tan pobre que no podía sostener ni una conversación
  • Tan pobre  que de niña las únicas muñecas que pudo tener fueron las de las manos.
  • ¡Tan pobres que allá no comen pollo sino que maman gallo!
  • Era un barrio tan pobre que cuando pasaba el camión de la basura la gente gritaba: “¡Suban dos bolsas!”
  • ¡Tan pobre la familia que cuando llegó la cigüeña hicieron un sancocho con ella!
  • En una casa vivían personas tan pobres, que los ratones cuando se engordaban venían a nuestra casa para hacer dieta.
  • ¡Un pueblo tan pobre que celebraron el día que en el hospital compraron unos rayos X a vela!