risa

Por un puñado de tierra

La señora llama de urgencia al médico de la familia:
-Doctor, doctor, mi hijo se comió un puñado de tierra. ¿Será que le hace daño?
Responde el médico con tono tranquilo:
-Tranquila mi señora, ¡conozco varios abogados que se han ‘tragado» fincas enteras y no les ha pasado nada!

El juramento

El juez al acusado:
—¿Jura decir la verdad, sólo la verdad y nada más que la verdad?
—No.
—¡uy! ¡Usted es el primero en decir la verdad!

La paga del abogado

Dos amigos conversan, uno le dice al otro en tono de tristeza:
-Cuando nos separamos acordamos entre  mi mujer, el abogado y yo, que quien se quedará con el dinero también se quedaba con los niños
–¿Y tu mujer se quedó con ellos?
–No. ¡El abogado!

Hay que seguir el buen camino

En una rueda de prensa la periodista le pregunta al comisionado de paz:
-Y díganos señor comisionado de paz para los reinsertados, ¿cuáles han sido los resultados del programa experimental de reinserción de guerrilleros?»
«Pues hemos tenido una de cal y una de arena; de los dos guerrilleros que se presentaron voluntarios para el proyecto uno ha decidido hacerse abogado, pero parece que el otro quiere seguir por el buen camino!

El chiste del ratón de oro

Un señor fue a una tienda en un barrio chino y vio que están vendiendo un ratón de oro. La curiosidad lo asota así que pregunta:
-¿Y ese ratón de oro para qué es?
El chino que atiende le aclara:
-Eso es de una leyenda antigua y la historia es muy larga. Si lo compra hay que comprar también la historia.
El hombre hace caso omiso y solo compra el ratón dejando de lado la historia del misterio que rodea aquel roedor de oro.
Al salir de la tienda se da cuenta que muchos ratones empiezan a perseguirlo, maneja por la autopista y al llegar a su casa, ésta se llenó rápidamente de ratones. Preocupado, el tipo salió a caminar, seguido por todos los ratones que no paran de perseguirlo así que busca la playa y tira el ratón de oro al mar, los ratones se lanzan también al océano muriendo todos ahogados.
Dos horas más tarde el hombre entra de nuevo a la tienda del barrio chino, el hombre que lo atendió le pregunta:
-¿Vino por la historia, no?
-No. ¡Vine a ver si tiene un abogado de oro!

Ponerse repelente

-¡Qué molestia estos mosquitos!
-Ponte repelente.
-Madre mía, ¡qué ingente cantidad de dípteros nematóceros!

Cómo matar al protagonista

Un escritor de libros conocido por su mala reputación le dice a su sincero amigo:
-Estoy atorado en el quinto acto, no sé como matar al protagonista.
-Fácil. ¡Léele los cuatro anteriores actos y lo matas de aburrimiento!

Desayuno dietético

El cliente grita al ver el desayuno que le ha traído el mesero:
-¡Mesero! ¡En mi plato hay un gusano!
-No señor, ¡Esa es la salchicha!