En una consejería el pastor le pregunta a la atribulada esposa:
-Le está sentando bien a su marido eso de pensar: “¿Qué haría Jesucristo en este caso?”
-No mucho pastor, el otro día tuvimos un terrible problema y lo escuché decirse: “¿qué haría Jesus Cristo en este caso?”
-¿Y qué pasó?
-Se desapareció por tres días.
Para descubrir si roncas
Cansado de las continuas quejas de su esposa por los ronquidos decidió poner una grabadora a escondidas para confirmar si era cierto lo que su atribulada mujer le contaba: que sus ronquidos eran demasiado fuertes. Puso la grabadora en la mesa de noche sin que su esposa se diera cuenta y al día siguiente al despertar lo primero que hizo fue escuchar la grabación y efectivamente, oyó los enormes decibeles de su ronquido… y también la voz casi silenciosa de su esposa que le decía a alguien: «¡Siga, siga que está dormido!»






