Al entrar al cine se aterra de encontrar allí a su amigo que sentado con su perro ven la película. El can disfruta de cada escena así que el aterrado hombre dice:
-¡Me parece extraordinario que su perro esté disfrutando de la película!
El dueño del perro responde:
–Más extrañado estoy yo, ¡cuando leyó el libro no le gustó!
En el emboltellamiento
La preocupada y muy enojada esposa le marca al teléfono a su alcohólico esposo:
-¿Dónde estás?
En tono alicorado el esposo le dice:
-Mi amor, ¡no he podido llegar porque estoy en un embotellamiento!
-¿Y a qué horas crees que vas a llegar?
-¡Cuando se acaben las botellas!