Le cobra a quien le debe dinero y hace tiempo no le paga y se le escabulle:
-Que hubo de los cinco mil, ¿O es que ya se le olvidó?
–No, ¡Déme un tiempito!
–¿Para pagarme?
–No, ¡Para olvidarlo!
Pa’l perro…
Al terminar de almorzar en el restaurante, el papá de la familia pobre se da cuenta que ha sobrado algo de comida así que le dice al mesero:
-Caballero, me echa lo que sobró en una caja por favor? Es para dársela al perro..
Benito se entusiasma entonces y dice:
-¡Uy que chévere! ¡me van a comprar perro!